Voluntarios de Protección Civil han recorrido esta tarde la ribera del Ebro dentro del operativo municipal de emergencias desplegado ante la crecida extraordinaria del río, que llega a estas horas a la capital aragonesa con un caudal de 2.092 metros cúbicos y una altura de 5,4 metros, según datos de la CHE.
Desde las 16.00 horas, los voluntarios han recorrido los puntos más críticos del término municipal, desde Monzalbarba y Juslibol hasta el azud, pasando por el parque del Agua, el recinto de Ranillas, Helios o el parque de Macanaz, zonas que se han inundado debido a la crecida y que se encuentran cerradas al público desde este lunes.
El trabajo de los voluntarios de Protección Civil se ha centrado en comprobar la señalización de las zonas inundadas, adelantarlas en los casos que ha sido necesario y asegurar que se respetan las áreas cerradas al público.
En este punto, han hecho especial hincapié, ya que la crecida del Ebro está generando mucha expectación, por lo que han recordado a los ciudadanos/as que deben prudentes y, en ningún caso, sobrepasar las balizas debido a la peligrosidad que entraña el Ebro en esta situación.