Elisabeth Leonskaja, una de las más grandes intérpretes de piano de nuestro tiempo, está en Galicia para participar en el Festival Clasclás, dedicado este año a honrar el legado de las mujeres en la música. A sus 78 años, Elisabeth no concibe una vida sin el piano, un amor que ha perdurado desde sus primeros recuerdos gracias a su madre, quien la introdujo en este mundo cuando tenía solo 7 años.
Nacida en Tiblisi en 1945, Elisabeth Leonskaja fue una niña prodigio que estudió en el Conservatorio de Moscú y ganó reconocimiento internacional por su virtuosismo y sensibilidad musical. A lo largo de su carrera, ha sido aclamada en todo el mundo y ha recibido numerosos premios, incluida la Medalla de Honor de Austria y el título de Miembro Honorario de la Konzerthaus de Viena.
Durante una pausa en sus ensayos para el concierto en Pontevedra, Elisabeth comparte con calidez y serenidad su profunda conexión con el piano: «No sé si el piano es una extensión de mí misma o si soy una extensión de mi piano. Este es mi lenguaje, mi forma de expresión más íntima y poderosa».
Hablando sobre el papel de las mujeres en la música, tema central del festival este año, Elisabeth expresa su punto de vista con humildad y respeto: «Soy una mujer y no me pongo a comparar con los hombres. Tengo un profundo respeto por todos, especialmente por los creativos». Aprecia la iniciativa del festival de destacar la contribución femenina en un campo dominado históricamente por hombres.
Además de sus logros musicales, Elisabeth ofrece consejos inspiradores para las nuevas generaciones de músicos: «Confíen en ustedes mismos, mantengan la disciplina y el respeto por los compositores y sus colegas. La amabilidad y el respeto son fundamentales en este camino».
Con una carrera tan impresionante y una personalidad tan cálida y sabia, Elisabeth Leonskaja continúa inspirando a través de su música y sus enseñanzas. Su actuación en el Festival Clasclás promete ser un evento inolvidable para todos los amantes de la música clásica en Galicia.