La medida del Patronato Municipal de Educación y Bibliotecas es una solución provisional hasta que se lleve a cabo la reforma y traslado al local en el que se ubicará la nueva biblioteca.
El actual espacio, que acumula años de deterioro, ha debido ser clausurado por no reunir las condiciones mínimas para su funcionamiento, tal y como ha explicado la concejala Paloma Espinosa.
Desde el próximo día 14 de febrero, y de forma quincenal, el barrio rural de Montañana contará con servicio de Bibliobús. Será los viernes alternos en horario de 16 a 17,30 horas, con parada junto al pabellón municipal. De esta forma, el Patronato Municipal de Educación y Bibliotecas del Ayuntamiento de Zaragoza da solución al cierre del actual local de la biblioteca, que acumula años de deterioro y no reúne las condiciones mínimas de uso, motivo por el cual permanece clausurado desde el mes de diciembre.
El servicio de Bibliobús se plantea como solución provisional hasta que se acometa el traslado a un nuevo local, que requiere una reforma integral, en el mismo edificio en el que se ubica la ludoteca municipal. Esta ambiciosa inversión será incluida en el convenio de barrios rurales entre el Ayuntamiento y la Diputación Provincial de Zaragoza.
«Nuestro objetivo es dignificar el servicio en el nuevo local, mucho más amplio y moderno. Mientras tanto, optamos por el bibliobús como una solución de calidad, que funciona con éxito en los barrios que carecen de biblioteca municipal», ha explicado Paloma Espinosa, concejala de Educación, y vicepresidenta del Patronato Municipal de Educación y Bibliotecas.
Espinosa ha subrayado que «la decisión responde a una necesidad que debía haberse abordado hace muchos años». «El actual espacio es muy reducido, de tan solo 50 metros cuadrados, y presenta un gran número de deficiencias, como goteras recurrentes que han causado desprendimientos en el techo y alguna inundación, una avería grave del sistema de calefacción o un escalón a la entrada que supone una barrera arquitectónica para las personas con movilidad reducida», ha expuesto la concejala.
Además, los baños se ubican en otro local anexo y en desuso, lo que supone un trastorno para el personal y usuarios de la biblioteca; y el centro no cuenta con servicio de préstamo automatizado ni acceso público a Internet, debido a la antigüedad de las líneas telefónicas.
Paloma Espinosa ha argumentado que «las penosas condiciones que arrastra este equipamiento están sin duda relacionadas con su bajísimo nivel de uso». En 2019 se han realizado 947 préstamos, cifra un 53% inferior a la media de otras bibliotecas similares de la red municipal. Durante el mismo ejercicio, 109 personas han sido socias activas de la biblioteca de Montañana, un 58% por debajo de la media.