El 60% de los españoles se muestra contrario a restringir la circulación de los vehículos diésel en las ciudades

El 11% desconoce el significado del distintivo ambiental

Un estudio realizado por la compañía de renting, gestión de flotas y movilidad corporativa Alphabet, revela que el 60% de los españoles se muestra contrario a la restricción de la entrada de vehículos diésel al núcleo de las ciudades.

La V Radiografía de los Hábitos de Movilidad de los Españoles, señala que con un 71% de opiniones en contra, Badajoz lideraría el ranking de ciudades donde menos aceptación tendrían estas restricciones, el segundo lugar es para Oviedo, con un 65%. Un 57,5 de los madrileños se posicionan en contra de la restricción del diésel. el informe revela también que Palma de Mallorca, con un 54% en contra, es la ciudad donde mejor acogida tendría esta medida.

En datos absolutos, un 55% de los madrileños se muestra en contra de las restricciones frente al 41% del conjunto de la población española que se posicionaría a favor, siendo Valladolid la urbe donde más apoyos obtendría (un 49%).

El estudio también refleja que el 28% de los encuestados optaría por ir caminando si estuviera prohibido acceder al centro de la ciudad en automóvil y tan solo un 6% de los encuestados elegiría la bicicleta como alternativa para desplazarse, siendo los pamploneses los que más optarían por esta alternativa (14%).

Respecto a la adquisición de nuevos vehículos, el 30% de los encuestados se decantaría por un vehículo eléctrico si tuviera que comprarlo en este momento. La razón por la que adquirían este tipo de vehículo se debe a motivos sostenibles (79%), seguida por la posibilidad de futuras restricciones de circulación en las ciudades (38%).

Además, el coche eléctrico sigue siendo considerado por un alto porcentaje de los encuestados como la solución ideal para moverse por la ciudad como así lo afirma un 67%, mientras que a un 83% le gustaría conducirlo para sus desplazamientos habituales.

No obstante, aunque los motivos ecológicos son el beneficio más claro, los españoles le siguen encontrando algunas desventajas como «la escasa red de puntos de recarga, su coste o su baja autonomía».

 

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