En el campo se sigue hablando de la falta de agua y los datos sobre la reserva hídrica en la cuenca del Ebro, sobre todo en la margen izquierda, muestran la realidad a la que se enfrentan en el ecuador del mes de mayo. Si hace unas semanas se declaraban a las cuencas del Aragón y los Arbas en situación de emergencia, ahora se suman las del Gállego y el Cinca. En situación de alerta están las cuencas del Noguera-Ribagorzana y el Ésera, en la Ribagorza.
La ausencia de precipitaciones y el deshielo anticipado hacen que los niveles de los embalses sigan bajando sin que reciban nuevas aportaciones. Hoy la cuenca tiene un 49,7 % de reservas de agua. Hace un año, ese porcentaje era de algo más del 76% mientras que el promedio de los últimos cinco últimos años es del 79%.