A medida que se acerca el emocionante Día del Pilar, los zaragozanos empiezan a preparar sus trajes regionales para lucir el próximo 12 de octubre ante la Virgen. En el recorrido desde la plaza Aragón hasta la plaza del Pilar, se pueden ver trajes de todo tipo, algunos más tradicionales que otros. Sin embargo, en la Ofrenda de Flores, hay reglas de vestimenta que deben seguirse para mantener el rigor histórico. Natalia Arbués, propietaria de la tienda de indumentaria San Jorge, nos explica algunas de estas normas.
Uno de los puntos de discusión son las gafas de sol. Si bien las gafas de ver son permitidas, las de sol no son bien vistas por los oferentes más tradicionales. Lo mismo ocurre con los relojes, que, aunque pueden esconderse bajo las mangas, se recomienda no llevarlos.
El teléfono móvil es otro elemento que debe usarse con moderación. Puede utilizarse para tomar fotos, pero en su mayoría debe mantenerse guardado y no en la mano.
En cuanto al aspecto personal, las mujeres deben llevar el pelo recogido. En caso de cabello corto, se puede usar un postizo. En cuanto al maquillaje, es mejor evitarlo o utilizarlo de manera muy discreta.
Los mantones bordados son una prenda común, pero es importante llevarlos de acuerdo con las normas históricas. Los hombres deben abrochar siempre sus chalecos y llevarlos debajo de la faja.
El cachirulo, un pañuelo típico de las fiestas, no se usa en la Ofrenda, excepto en su versión tradicional y en la cabeza.
En cuanto a las camisas, algunos optan por la manga corta, pero los puristas insisten en que debe ser larga. La chambra de las mujeres, por ejemplo, debe cubrir hasta la muñeca.
Finalmente, llevar un bolso como parte del atuendo tradicional no es históricamente correcto. En su lugar, se recomienda la ‘faldiquera’, una pequeña bolsa de tela que se llevaba debajo de la falda.
A medida que los zaragozanos se preparan para rendir homenaje a la Virgen del Pilar, estas pautas de vestimenta les ayudarán a mantener viva la tradición en la Ofrenda de Flores.