Investigadores de la Universidad de Columbia han anunciado un emocionante avance en la captura y almacenamiento de dióxido de carbono (CO2). Han descubierto una nueva forma de convertir el CO2 atmosférico en piedra en un proceso que podría ayudar a combatir el cambio climático.
El proceso implica inyectar CO2 líquido en una solución de agua salada a alta presión, lo que lleva a la formación de minerales en cuestión de meses. Estos minerales son similares a los que se encuentran en rocas calizas y pueden ayudar a eliminar el CO2 de la atmósfera.
Lo que hace que este método sea particularmente prometedor es que no requiere una inversión significativa en tecnología costosa y utiliza ingredientes asequibles y ampliamente disponibles. Además, estos minerales podrían permanecer estables durante miles de años, lo que significa que el CO2 capturado de esta manera podría quedar atrapado en la piedra de forma segura durante mucho tiempo.
Este descubrimiento ofrece una nueva esperanza en la lucha contra el cambio climático al proporcionar una solución efectiva para reducir la concentración de CO2 en la atmósfera. Aunque aún se necesitan investigaciones adicionales y pruebas a mayor escala, este avance marca un paso significativo hacia un futuro más sostenible y menos contaminante.