El aroma a vino impregnó el aire del barrio de Montañana en Zaragoza este fin de semana, donde se celebró la decimosexta edición de la Feria de los Vinos Aragoneses. Más de 6.000 personas se dieron cita en este evento que reúne lo mejor de la vitivinicultura de la región.
Una veintena de bodegas, desde las reconocidas denominaciones de origen hasta pequeñas productoras locales, deleitaron a los asistentes con sus exquisitos vinos, cavas y vermuts. La diversidad de la oferta vinícola reflejó la riqueza de la tradición vitivinícola de Aragón, con una producción que asciende a aproximadamente 135.000 hectolitros.
La alcaldesa de Montañana expresó su satisfacción por el éxito de la feria, que atrajo a una gran cantidad de visitantes desde el jueves. Entre los productores presentes destacaron tanto las bodegas consolidadas como las nuevas promesas, que mostraron su pasión por el vino a través de sus primeras fermentaciones.
El evento no solo fue una oportunidad para disfrutar del vino, sino también de la gastronomía local, con propuestas que incluyeron el mejor torrezno del mundo. Además, los asistentes tuvieron la oportunidad de participar en catas dirigidas de vino, cava y vermuts aragoneses, enriqueciendo aún más la experiencia sensorial de la feria.