El caso de Begoña Gómez plantea interrogantes sobre corrupción, tráfico de influencias, o simplemente cuestiones de legalidad y ética. De hecho, según la fuente de información que leas, puede ser desde apocalíptico hasta que ni siquiera exista un caso; eso lo determinarán los jueces. Sin embargo, es innegable que cada persona tiene derecho a dirigir su vida como mejor le parezca. La verdadera preocupación radica en si otras personas en situaciones similares recibirían el mismo trato, con puertas abiertas y todas las facilidades, incluyendo la colaboración de empresas en su taller. La respuesta parece ser un rotundo no. Pero no culpo a la persona beneficiada, sino a aquellos que se pliegan ante ella, rindiendo pleitesía a su estatus en lugar de a su mérito.
En el caso que nos ocupa, parece ser que la Cámara de España se volcó en ayudar a «captar empresas» para la plataforma de Begoña Gómez. La corporación pidió «colaboración» a las cámaras territoriales para «realizar el lanzamiento y puesta en producción» de Transforma TSC, marca registrada por la esposa del presidente. Por ejemplo, la Cámara de Zaragoza organizó el 19/10/2023 un taller llamado ‘Súmate al cambio sostenible’, en el que participaron un total de 15 medianas empresas de Zaragoza. En este evento se presentó Transforma, una innovadora herramienta gratuita para pymes que ayuda a las empresas a medir el impacto en sostenibilidad medioambiental y social.
La situación se observa claramente en numerosas fundaciones, asociaciones y sindicatos, que a menudo parecen existir solo para justificar salarios financiados con subvenciones obtenidas a través de acuerdos y convenios inútiles. Estos premios, a menudo sin dotación económica, compran la complicidad futura de los beneficiarios, que quedan en deuda por el reconocimiento recibido.
Un claro ejemplo son las campañas de los medios de comunicación, que a menudo son más fachada que sustancia. ¿Acaso un cliente potencial trataría igual a Don Anónimo de Tal que al hijo de un ministro del gobierno de turno, sea del color político que sea? A menudo priorizan la forma sobre el contenido. Estas plataformas moldean las noticias según sus intereses y son responsables de perpetuar el dicho aquel de que «nunca dejes que la verdad te arruine un buen titular».
En última instancia, vivir obsesionado con los demás, en la resignación, el continuismo o la venganza, es una forma de autodestrucción diaria. Cada día así es un tiro en el pie, hasta que finalmente uno se desploma.
