La situación de escasez de viviendas de alquiler asequibles en el Pirineo aragonés está generando dificultades para los trabajadores de temporada, ya que la mayoría de las más de 4.000 viviendas de uso turístico en Aragón se concentran en las zonas del Pirineo y el Prepirineo oscense. Esto ha llevado a un aumento en los precios de los alquileres, lo que dificulta el acceso a la vivienda para los trabajadores de la zona.
Ante esta problemática, ayuntamientos y trabajadores de temporada están buscando soluciones para cubrir la demanda de vivienda. En localidades como Aínsa, se ha implementado regulaciones para limitar el número de apartamentos turísticos, lo que ha contribuido a frenar el aumento de estas viviendas y ha permitido abrir más oportunidades de alquiler de larga duración para los residentes locales.
Sin embargo, la situación sigue siendo desafiante, especialmente en municipios como Aínsa, Boltaña o Labuerda, donde el mercado de alquiler está colapsado debido al gran número de plazas de alojamiento turístico disponibles. Los ayuntamientos están considerando diversas medidas, como la compra de viviendas por parte del municipio, la colaboración para impulsar la construcción de nuevas viviendas y la búsqueda de soluciones a corto plazo para satisfacer la demanda.
Por otro lado, algunos trabajadores de temporada se ven obligados a vivir en autocaravanas debido a la falta de opciones de vivienda asequible. Los altos precios de los alquileres, especialmente en zonas cercanas a las pistas de esquí, hacen que muchas viviendas sean inaccesibles para los trabajadores con salarios temporales. Esta situación deja a los trabajadores con pocas opciones, como desplazarse diariamente desde otras localidades o buscar alternativas de vivienda más económicas, como las autocaravanas.