El departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Gobierno de Aragón ha respondido con rapidez a la solicitud de los sindicatos agrarios convocando la Mesa de la Sequía en tan solo unos días. La reunión, presidida por el consejero Angel Samper, contó con la participación de organizaciones agrarias, cooperativas y la Federación de regantes de la cuenca del Ebro, FEREBRO.
La Confederación Hidrográfica del Ebro informó sobre las carencias pluviométricas, especialmente en la margen derecha de la cuenca desde el Huerva hasta el Guadalupe. Se han registrado valores mínimos históricos en varias regiones, lo que ha impactado significativamente en la producción agrícola, especialmente en las comarcas de Belchite, Bajo Aragón y Comarca de Daroca.
Se estima que alrededor de 780.000 hectáreas de cereal en Aragón se verán afectadas, lo que representa un tercio de la superficie cultivada en el 2023. El consejero Samper señaló que la baja pluviometría resultará en rendimientos bajos o muy bajos de la cosecha de cereal de invierno, afectando también a la ganadería extensiva por la pérdida de pastos.
Como respuesta a esta situación, se han tomado medidas urgentes, siendo la primera la convocatoria de la Mesa de la Sequía. Además, se ha decidido flexibilizar el cobro integral de la Política Agrícola Común (PAC), considerando las zonas críticas en Aragón y los jóvenes agricultores.
El director general de Producción Agraria, Carlos Calvo, anunció que se ampliarán las flexibilizaciones ya contempladas en la Resolución del Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación de enero, adaptando plazos y condiciones para la campaña 2024, así como las ayudas directas acopladas por superficie y del segundo pilar o Programa de Desarrollo Rural (PDR).
Tras esta primera reunión, el departamento se compromete a estudiar medidas para mitigar los daños causados por la sequía en las zonas delimitadas por los técnicos y a volver a reunirse en las próximas semanas para evaluar la situación y tomar nuevas acciones si es necesario.