Durante la XV Gala del Teatro Aragonés, Lita Claver, cariñosamente conocida como La Maña, hizo resonar el recinto con su entusiasmo al recibir el tan ansiado premio, comparando su alegría con la euforia que desataría el ascenso del Zaragoza a Primera División. En un ambiente festivo y colmado de aplausos, La Maña evocó con humor sus modestos inicios y alentó al público a sumergirse en la magia del momento presente. La velada, marcada por una ecléctica diversidad artística, transitó desde las profundidades del drama hasta la ligereza de la comedia, pasando por las emociones que despiertan las marionetas, el asombro del circo y la gracia de la danza. El humor, siempre cómplice, se manifestó en diversos sketches y actuaciones, entre los que destacaron las intervenciones de Yolanda Blanco y el encanto desbordante del grupo Che y Moche.
Pero la noche no solo fue un despliegue de entretenimiento; también fue un momento de reconocimiento para los protagonistas del mundo teatral aragonés. Ana Abán, en su despedida como gestora de ARES, instó a las instituciones a abordar los desafíos que enfrenta el mercado teatral, marcando así un llamado a la reflexión sobre el futuro de las artes escénicas en la región. Además, se otorgaron merecidos galardones a artistas emergentes, destacando la labor de Arteria Producciones y su director, Josean Mateos, cuya marioneta veterana robó sonrisas y aplausos en igual medida.
El premio honorífico, merecidamente, fue para el Teatro Principal de Zaragoza, cuyos representantes agradecieron emocionados el apoyo del público y de la ciudad. El talento local también brilló con fuerza, como lo demostraron las bailarinas formadas en Aragón bajo la tutela de María de Ávila, así como Luisa Sancho y Elena Iglesias, directoras del Pfalztheater, quienes enorgullecieron a su tierra natal con su destacada labor en tierras alemanas.
En medio de la celebración, María López Insausti, presidenta de la Asociación ARES, recordó la vitalidad del teatro aragonés, desmontando la falaz idea de que es una forma de cultura subvencionada. Con cifras contundentes, López Insausti resaltó el vigor del sector, evidenciando su capacidad para generar ingresos y empleo en la región.
El cierre de la noche estuvo marcado por la emoción y la frescura, con la revista de Luis Pardos ofreciendo un broche de oro a una velada llena de emociones, risas y, sobre todo, un compromiso inquebrantable con el arte y la cultura que hacen de Aragón un bastión de creatividad y talento escénico.